Arroyo de San Zadornil
Peña Carrias se alza sobre este bello pueblo por el que se recomienda dar un paseo y visitar su iglesia, la bolera y el lavadero, auténticos tesoros de esta localidad, última antes de dejar Burgos y entrar en Álava, en el parque natural de Valderejo.
No puedes dejar de ver
La iglesia de Santa María: del siglo XIV está construida en un elegante estilo gótico popular. En la torre el reloj sigue marcando las horas que los habitantes del cercano pueblo de Corro quisieron ver con tanto entusiasmo. Su maquinaria data de 1855 y está perfectamente conservada gracias a los vecinos que tienen encomendada una labor que se ha transmitido de generación en generación.
El Bolo Tres Tablones: este juego ancestral de la comarca de las Merindades ha logrado sobrevivir a la despoblación y perdurar como una parte esencial de la identidad de esta tierra. En Arroyo de San Zadornil se encuentra una bolera rehabilitada en la que además del sonido de los bolos al caer, aún resuenan palabras como cureña, cas, mico, triscar o morra gracias al esfuerzo e implicación de muchos apasionados de este juego convertido hoy en día en modalidad deportiva federada. En Arroyo todavía se conservan los antiguos bolos hechos con madera de boj y nogal.
