Las Secuoyas
En uno de los barrios más especiales de la metrópoli, viven Las Secuoyas. Llegaron de la mano del hombre en 1960, junto al resto de coníferas extranjeras. En aquella época era habitual el desarrollo de este tipo de experiencias. Atrás quedó su patria y aquí, como en Norteamérica, saben que cuentan con la eternidad para llegar a ser gigantes.